ABU DABI.- El presidente estadounidense, Donald Trump, cerró este viernes una gira de cuatro días por Arabia Saudí, Catar y Emiratos Árabes Unidos (EAU) en la que facilitó acuerdos millonarios y se mostró impresionado con la cultura y avance de los países del Golfo, pero no reaccionó a las muertes de civiles en la Franja de Gaza.
Antes de despegar en el Air Force One, Trump fue preguntado sobre la intensificación de las operaciones militares israelíes en la Franja y respondió que «muchas cosas buenas van a pasar a lo largo del próximo mes y vamos a tener que ayudar a los palestinos también. Mucha gente se está muriendo de hambre en Gaza. Tenemos que mirar a ambos bandos, pero haremos un buen trabajo».
Trump mencionó brevemente también la situación hoy durante un encuentro empresarial en Abu Dabi: «Tenemos situaciones muy serias y estamos vigilando lo que pasa en Gaza y tenemos que ocuparnos de eso porque mucha gente está muriendo de hambre. Muchas cosas malas están pasando».
En las últimas 24 horas, el Ejército israelí ha matado a al menos 136 personas en bombardeos que han golpeado todos los rincones de una Franja de Gaza devastada en un recrudecimiento de las hostilidades.
Durante su visita, Trump ha pasado de puntillas por temas de dificultad geopolítica relacionados con la región para poner el foco en los «tres o cuatro billones de dólares» en acuerdos comerciales entre empresas estadounidenses e inversores del Golfo, especialmente en defensa, semiconductores y aviación.
El jueves, en la parada de Doha, Trump dijo que quería que Gaza se convirtiera en una «zona de la libertad», de nuevo, sin mencionar el recrudecimiento de los ataques en la Franja.
Los líderes árabes tampoco le presionaron sobre el tema, aunque el más claro fue el príncipe heredero y líder de facto de Arabia Saudí, Mohamed bin Salmán, que pidió a Trump trabajar para poner fin al sufrimiento del pueblo palestino.
«Gaza ha sido un territorio de muerte y destrucción por muchos años», aseguró Trump ayer en Catar, donde añadió que tiene «conceptos para Gaza que creo que son muy buenos».
Una constante desde que tomó el poder y que repitió en esta visita es que Estados Unidos debe estar involucrado en un nuevo estatus para Gaza y que el hecho de que la destrucción de las ciudades del enclave sea casi completa obliga a repensar por completo el futuro de sus habitantes.