MILWAUKEE.- El expresidente estadounidense Donald Trump (2017-2021) aceptará este jueves su nueva nominación como candidato republicano a la Casa Blanca con su primer discurso público tras haber sido víctima de un intento de asesinato el sábado.
La convención nacional que su partido celebra en Milwaukee desde el lunes y hasta hoy lo tiene todo preparado: el magnate neoyorquino acudió la víspera al podio para situarse sobre el escenario y tener controlada la posición de las cámaras, y cientos de globos rojos, azules y blancos cuelgan ya del techo a la espera de ser soltados en el gran final de fiesta.
En estos cuatro últimos días Trump ha ido a la tribuna del estadio Fiserv para presenciar las intervenciones de otras figuras del partido y de miembros de su propia familia. Entre ellos su hijo Donald Trump Jr., la hija de este, Kai Madison, de 17 años, y su prometida, Kimberly Ann Guilfoyle.
Asimismo, Lara Trump, mujer de su hijo Eric y desde marzo copresidenta del comité del partido, el que controla la maquinaria electoral y las finanzas del mismo. Su hija Tiffany solo le ha acompañado y se espera que este jueves lleguen las dos grandes ausentes hasta ahora y durante la campaña: su mujer, Melania, y su hija Ivanka.
Pero todo el foco está puesto en el exmandatario, que lleva todavía la oreja derecha vendada tras el impacto de bala recibido durante su mitin en Butler (Pensilvania), donde un joven de 20 años, abatido después por los agentes, mató además a una persona del público e hirió a otras dos.
Trump ha reconocido que lo sucedido le ha hecho reescribir su discurso. Un día después indicó a la revista Washington Examiner que le había dado la vuelta «por completo»: «Es una oportunidad para unir el país», sostuvo.
Y en Milwaukee, la mayor ciudad del estado clave de Wisconsin, los republicanos coinciden en que se necesita unidad.
Robert Garay, delegado por Texas, quiere escuchar «un mensaje de esperanza», uno al que todos se puedan sumar de cara a las elecciones del 5 de noviembre. Tras el ataque, dice, Trump está más tranquilo y «consciente del momento» presente.
Los delegados de los distintos estados fueron quienes depositaron su voto de forma unánime para confirmar la candidatura de Trump y validar la de su «número dos», el senador por Ohio J.D. Vance, que el miércoles se estrenó a su vez ante los suyos con su primer discurso.
Crissy Kantor, de Nuevo Hampshire, dice a EFE que realmente no espera «nada excepto unidad y que él comparta lo que ha estado compartiendo desde el principio: las políticas para poner a Estados Unidos primero» y unirlos.