Avances en el registro civil y nuevos retos para garantizar la documentación completa de la población
Santo Domingo, República Dominicana. – En el marco del “Proyecto Mejora de la Generación de Estadísticas Vitales en República Dominicana para la Protección Social, Acceso a la Ciudadanía y Rendición de Cuentas”, se presentó un informe que evalúa el estado del registro de nacimientos y defunciones en el país. Este estudio, realizado mediante la unificación de bases de datos de instituciones clave como el Registro Civil de la Junta Central Electoral (JCE), el Ministerio de Salud Pública (MISPAS) y el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF), tiene como objetivo fortalecer el sistema de estadísticas vitales nacionales.
El análisis, que cubre los nacimientos registrados entre 2018 y 2020, revela que durante este periodo se registraron 606,361 nacimientos, de los cuales el 85% fue inscrito ante una autoridad civil. Sin embargo, el 15% restante fue registrado únicamente en el sistema de salud, lo que pone de manifiesto brechas persistentes, especialmente entre madres jóvenes y aquellas sin la documentación necesaria para formalizar el registro. A pesar de esto, la cobertura total de registro mejoró en 2019, reflejando los esfuerzos de las instituciones involucradas.
El estudio también destaca que, aunque un 99.6% de los nacimientos ocurren en instituciones de salud, no todos se traducen en un registro civil. Las diferencias son notorias según el tipo de centro de salud: en el sector privado, el 96% de los nacimientos son registrados, mientras que en los centros públicos el porcentaje varía entre el 79% y el 84%. Esta disparidad señala la necesidad de abordar las barreras en el proceso de registro, especialmente en hospitales públicos.
En cuanto a las defunciones, el informe revela que, entre 2015 y 2019, el promedio de registros alcanzó un 67.6%, con desafíos similares en cuanto a la calidad y consistencia de los datos, particularmente en las zonas rurales del país.
Miosotis Rivas Peña, directora general de la Oficina Nacional de Estadística (ONE), subrayó que “es fundamental fortalecer la integración interinstitucional para garantizar la calidad, precisión y consistencia de los datos, optimizando la coordinación entre las entidades responsables del registro civil y las instituciones de salud”. Además, recomendó ampliar la cobertura del registro civil, priorizando hospitales públicos y zonas remotas, con el objetivo de reducir las brechas existentes y asegurar la documentación de toda la población.
Finalmente, Rivas Peña destacó la importancia de implementar campañas de sensibilización y educación que promuevan el registro oportuno y los derechos asociados, fomentando una mayor participación ciudadana.
Este informe resalta el compromiso de las instituciones nacionales con el acceso universal a derechos fundamentales y la mejora continua de los sistemas de registro, lo cual es esencial para la formulación de políticas públicas inclusivas y equitativas.