Regresividad y progresividad en materia impositiva

Con frecuencia escuchamos hablar de impuestos progresivos y regresivos. He querido aportar algo al conocimiento y divulgación sobre estas dos filosofías en materia impositiva por lo que publico este artículo.

Regresividad y progresividad en materia impositiva: son conceptos que describen cómo impactan los impuestos a diferentes grupos de la sociedad en función de sus ingresos.

Filosofía de la Regresividad

Un sistema impositivo es regresivo cuando los impuestos representan una mayor proporción de los ingresos para las personas con ingresos bajos que para aquellas con ingresos altos. Esto significa que a medida que los ingresos aumentan, la tasa impositiva efectiva disminuye.

Ejemplos de Regresividad:

  1. Impuesto sobre las ventas: Un impuesto sobre las ventas del 10% sobre bienes y servicios afecta más a las personas de bajos ingresos, ya que gastan una mayor proporción de sus ingresos en bienes de primera necesidad.
  2. Impuesto sobre el valor agregado (IVA): Similar al impuesto sobre las ventas, el IVA es regresivo porque todos pagan la misma tasa, independientemente de su capacidad económica.
  3. Impuestos sobre productos básicos: Impuestos sobre alimentos o combustibles afectan desproporcionadamente a las familias de bajos ingresos, que destinan una mayor parte de su presupuesto a estos artículos esenciales.

Filosofía de la Progresividad

Un sistema impositivo es progresivo cuando los impuestos representan una mayor proporción de los ingresos para las personas con ingresos altos que para aquellas con ingresos bajos. En otras palabras, la tasa impositiva efectiva aumenta a medida que aumentan los ingresos.

Ejemplos de Progresividad:

  1. Impuesto sobre la renta personal: Un sistema de impuestos sobre la renta con tramos progresivos, donde las tasas impositivas aumentan con el nivel de ingresos, es un claro ejemplo de progresividad.
  2. Impuesto sobre la riqueza: Un impuesto sobre la riqueza (por ejemplo, bienes inmuebles, inversiones) de personas con patrimonio neto elevado asegura que aquellos con mayor capacidad económica contribuyan más.
  3. Impuesto sobre herencias: Impuestos más altos sobre herencias significativas que sobre herencias pequeñas buscan distribuir la carga impositiva de manera más equitativa según la capacidad de pago.

La progresividad y regresividad en los sistemas impositivos buscan equilibrar la equidad fiscal y la recaudación eficiente. Estas dos filosofías pueden influir significativamente en la distribución de ingresos y en la equidad social.

¿Cómo explicar los efectos de la progresividad y la regresividad? Ambos se aplican principalmente a los impuestos sobre la renta personal y al consumo. Sin embargo, los impuestos a las sociedades también pueden tener implicaciones en términos de equidad fiscal, aunque de manera indirecta.

Aquí le explico cómo:
Progresividad y Regresividad en Impuestos a las Sociedades

  1. Progresividad en Impuestos a las Sociedades:
  • Aunque menos común, algunos sistemas impositivos tienen tasas de impuesto corporativo que aumentan con el tamaño de las ganancias. Esto se asemeja a un sistema progresivo.
  • Ejemplo: Un país puede tener una tasa impositiva del 20% para las primeras $100,000 de ganancias y un 30% para ganancias superiores. Esto asegura que las empresas más grandes, con mayor capacidad de generar ingresos, contribuyan más.
  1. Regresividad en Impuestos a las Sociedades:
  • La regresividad puede surgir si las estructuras fiscales benefician desproporcionadamente a las grandes empresas o permiten que estas paguen menos impuestos relativos a sus ingresos.
  • Ejemplo: Exenciones fiscales significativas o deducciones disponibles solo para grandes corporaciones pueden resultar en una carga fiscal mayor para las pequeñas y medianas empresas, lo cual es regresivo.

Ejemplos de Progresividad en Impuestos Corporativos

  1. Tasas Graduadas: Algunos países implementan tasas impositivas escalonadas en función del tamaño de las ganancias, creando un efecto progresivo.
  2. Impuestos Mínimos Globales: El esfuerzo de la OCDE para establecer un impuesto mínimo global del 15% busca que las grandes corporaciones multinacionales paguen una tasa mínima de impuestos, independientemente de dónde generen sus ingresos.
  3. Recargos sobre Beneficios Excesivos: Algunos sistemas imponen recargos adicionales sobre beneficios que superan un determinado umbral, aplicando una carga adicional a las empresas más rentables.

Ejemplos de Regresividad en Impuestos Corporativos

  1. Exenciones Fiscales: Grandes corporaciones pueden beneficiarse de exenciones o incentivos fiscales que no están disponibles para las PYMEs, resultando en una mayor carga para estas últimas.
  2. Deducciones Desiguales: Sistemas que permiten mayores deducciones a grandes empresas, por ejemplo, por investigación y desarrollo, mientras que las pequeñas empresas no tienen acceso a las mismas ventajas.
  3. Incentivos a la Inversión: Grandes empresas pueden aprovechar incentivos fiscales para invertir en infraestructuras o tecnología, reduciendo significativamente su carga fiscal en comparación con las pequeñas empresas.

Aunque la progresividad y la regresividad son más evidentes en impuestos personales y al consumo, las políticas fiscales también influyen en la equidad y la competitividad del entorno empresarial.
Efectos Fiscales de la Progresividad y Regresividad en los Impuestos desde la perspectiva de los sujetos pasivos y el activo.

Sujetos Pasivos de la Obligación Tributaria (Contribuyentes)

Efectos Fiscales Favorables:

  1. Reducción de la Desigualdad: Los sistemas impositivos progresivos reducen la carga fiscal sobre los ingresos bajos, ayudando a disminuir la desigualdad económica.
  2. Incentivos para Ahorro e Inversión: Los impuestos regresivos sobre el consumo pueden incentivar el ahorro e inversión, ya que los ingresos no son gravados directamente.
  3. Mayor Disposición al Gasto: Con impuestos progresivos, los contribuyentes con menores ingresos retienen una mayor proporción de sus ingresos disponibles, aumentando su capacidad de consumo.
  4. Estímulo al Crecimiento Económico: La reducción de impuestos para las rentas más bajas puede estimular la demanda y el crecimiento económico.
  5. Transparencia Fiscal: Un sistema progresivo es percibido como más justo, aumentando la confianza en el sistema fiscal y mejorando el cumplimiento voluntario.

Efectos Fiscales No Favorables:

  1. Desincentivo al Esfuerzo: Las tasas impositivas altas pueden desincentivar el trabajo extra o la búsqueda de ingresos adicionales.
  2. Evasión Fiscal: Los sistemas progresivos pueden llevar a un aumento en la evasión y elusión fiscal, especialmente entre los de mayores ingresos.
  3. Carga Mayor en Bienes Esenciales: Los impuestos regresivos afectan más a los hogares de bajos ingresos, ya que gastan una mayor proporción de sus ingresos en bienes esenciales.
  4. Complejidad Administrativa: Los sistemas progresivos pueden ser más complejos de administrar y cumplir, aumentando los costos de cumplimiento.
  5. Impacto Negativo en la Inversión: Las altas tasas impositivas pueden desalentar la inversión empresarial y la creación de empleo.

Sujeto Activo de la Obligación Tributaria (Administración Tributaria)

Efectos Fiscales Favorables:

  1. Aumento de Recaudación: Los sistemas progresivos pueden aumentar la recaudación al gravar más a aquellos con mayores ingresos.
  2. Equidad Social: Los sistemas progresivos pueden contribuir a una mayor equidad social, ganando apoyo y legitimidad pública.
  3. Simplicidad en la Recaudación: Los impuestos regresivos, como el IVA, son más fáciles de administrar y asegurar el cumplimiento.
  4. Reducción de la Evasión Fiscal: La percepción de justicia en los sistemas progresivos puede reducir la motivación para evadir impuestos.
  5. Estabilidad de Ingresos: Los impuestos al consumo tienden a proporcionar una fuente de ingresos más estable en comparación con los impuestos sobre la renta.

Efectos Fiscales No Favorables:

  1. Costos Administrativos: La progresividad puede aumentar la complejidad y los costos de administración tributaria.
  2. Resistencia Política: Las reformas progresivas pueden enfrentar resistencia política y social, complicando su implementación.
  3. Evasión y Elusión: Los sistemas progresivos pueden incentivar a los contribuyentes más ricos a buscar maneras de evadir o eludir impuestos.
  4. Desigualdad en la Recaudación: Los sistemas regresivos pueden ser criticados por aumentar la carga sobre los contribuyentes de menores ingresos.
  5. Dependencia en Consumo: Los impuestos regresivos dependen del consumo, que puede fluctuar con la economía, afectando la estabilidad de ingresos fiscales.

Estas características muestran cómo la estructura impositiva afecta tanto a los contribuyentes como a la administración tributaria, con ventajas y desventajas dependiendo del enfoque progresivo o regresivo de los impuestos.