SANTO DOMINGO. – La Navidad es una época de fiesta, la cual es aprovechada para la realización de diferentes espectáculos que pueden adornar el cielo con luces y colores, pero que son acompañados de sonidos que pueden apagar la vida de un miembro de la familia, las mascotas.
Aunque existe la Ley 340-09 la cual, a través de la Dirección de Control de Explosivos y Fuegos Artificiales (DEFA), regula las actividades de producción, comercialización, transportación, almacenamiento, distribución y uso de artículos pirotécnicos o fuegos artificiales y su manipulación, que también prohíbe la venta y uso para el público, es ignorada por una gran parte de los ciudadanos.
Esa misma ley establece que la detonación y uso de fuegos artificiales está a cargo exclusivamente de las empresas pirotécnicas mediante permisos que otorga el Ministerio de Interior y Policía, como organismo responsable de articular las estrategias para la seguridad ciudadana.
Más allá de la cantidad de accidentes ocurridos en zonas residenciales, donde personas han resultado con quemaduras graves y otros han perdido la vida, los animales son altamente afectados por el fuerte sonido que produce el estallido de estos productos.
Traumas, fobias, miedo, estrés y muertes, son reacciones que pueden provocar en las mascotas, la detonación de los fuegos artificiales.
Así lo confirmó la estudiante de término de la carrera de Medicina Veterinaria, Ilse Puig, quien ha tenido que ver un sin número de casos, entre los que resaltan ataques de pánico y escapadas de casa.
De acuerdo con Puig, comparado con el oído humano, los animales tienen una sensibilidad auditiva mayor, haciendo que perciban los sonidos con mucha más intensidad. Estos pueden escuchar en frecuencias imperceptibles para las personas.
“Si en ocasiones de celebración, nosotros consideramos los sonidos de los fuegos artificiales como fuertes, ¿Qué será para ellos?”, agregó.
En ese orden, explicó que, por instinto, los animales intentan localizar el origen del sonido, y al verse incapaces de no encontrarlo, les provoca pánico, ansiedad y desorientación, en el caso de la pirotecnia.
Recomendaciones en las fiestas
Con el objetivo de evitar accidentes, muertes o situaciones de peligro, Puig compartió algunas recomendaciones que pueden ser herramientas útiles para cuidar a estos miembros especiales de la familia.
–Evitar dejar a las mascotas afuera.
-Dar largos paseos, en el caso de los caninos, para disminuir los niveles de ansiedad.
-Suministrar sus alimentos temprano, pues una vez inician las referidas actividades, no querrán comer.
-Colocarlos en una habitación cerrada, con ventilación, agua y luz reducida, además, quitar todos aquellos objetos que pudieran caer y hacerles daño.
-Poner música clásica o relajante, a un volumen que enmascare los sonidos de fuera.
-Consultar con su veterinario sobre el uso de ansiolíticos o relajantes, que permitan a su mascota estar en un umbral de tranquilidad completa.
Exhortó seguir estos consejos para mantener a las mascotas a salvo y disfrutar de las fiestas en paz, tranquilidad, felicidad y armonía.