EE.UU. ha expresado una acogida prudente ante la medida adoptada por Israel de abrir nuevas rutas de asistencia hacia la Franja de Gaza.
La decisión surge después de que el presidente Joe Biden hiciera una advertencia sobre la posibilidad de un cambio en la política estadounidense en respuesta a los ataques mortales ocurridos en la región.
Antony Blinken, Secretario de Estado de Estados Unidos, expresó que si bien es alentador el gesto de Israel de permitir más ayuda humanitaria en Gaza, lo verdaderamente importante será ver mejoras concretas en la situación actual en el terreno.
“Si bien son avances positivos, la verdadera medida de éxito son los resultados. Eso es lo que esperamos ver en los próximos días y semanas”, expresó durante su intervención junto a líderes de la Unión Europea en Bélgica.
Blinken señaló: ‘¿La ayuda está llegando de manera efectiva a las personas que la necesitan en toda Gaza? ¿Se están resolviendo los obstáculos y los retrasos en los cruces? ¿Contamos con un sistema mucho mejor para la coordinación y la seguridad de los trabajadores humanitarios que entregan la ayuda?’
Además, destacó que estos objetivos se evaluarían mediante métricas claras, como ‘el número de camiones que logran ingresar de manera constante’ y la cantidad de ayuda que llega a quienes la necesitan en Gaza, especialmente en la zona norte, donde mencionó que ‘casi el 100% de la población enfrenta una grave inseguridad alimentaria’ y hay ’10 indicadores de posibles crisis de hambruna’.
Blinken hizo estas declaraciones antes de la publicación de los resultados de la investigación de las FDI sobre los mortales ataques a los convoyes de ayuda de esta semana.
Las Fuerzas de Defensa de Israel han anunciado los resultados de su propia investigación sobre los ataques que costaron la vida de siete trabajadores humanitarios de World Central Kitchen en Gaza a principios de esta semana.
Según un comunicado emitido esta mañana, los hallazgos fueron presentados ayer al jefe del Estado Mayor del IDF, el teniente general Herzi Halevi. En consecuencia, las FDI han destituido a dos oficiales de sus cargos, reprendido a dos comandantes y sancionado al comandante senior responsable.”
El incidente ha generado llamados a una investigación independiente y demandas de Estados Unidos para que Israel haga más para permitir la entrada de ayuda a Gaza y proteger a los trabajadores humanitarios.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF, por sus siglas en inglés) dijeron que la investigación “descubrió que las fuerzas identificaron a un hombre armado en uno de los camiones de ayuda, tras lo cual identificaron a un hombre armado adicional. Después de que los vehículos salieron del almacén donde se descargó la ayuda, uno de los comandantes asumió por error que los hombres armados estaban dentro de los vehículos acompañantes y que estos eran terroristas de Hamás”.
El comunicado añadió: “Las fuerzas no identificaron los vehículos en cuestión como asociados a WCK. Tras una identificación errónea por parte de las fuerzas, estas dirigieron su objetivo hacia los tres vehículos de WCK basándose en la clasificación errónea del evento y la identificación equivocada de los vehículos como conteniendo operativos de Hamás en su interior.”