Las elecciones municipales a celebrarse este próximo 18 de febrero no necesariamente van a definir el panorama electoral de las elecciones congresuales y presidenciales del 19 de mayo.
Hemos escuchado a los principales líderes de los partidos políticos decir a lo largo de la campaña que febrero será una muestra de lo que sucederá en mayo, haciendo referencia a que sus partidos van a posicionarse y ganar las elecciones de febrero, y que esos resultados positivos también se reflejarán en las elecciones congresuales y presidenciales.
Existe un factor muy interesante por analizar ante estas afirmaciones, y es que un partido puede tener muy buena aceptación para las presidenciales en un municipio o distrito municipal, pero no necesariamente el candidato a alcalde de ese partido está igualmente valorado que el candidato presidencial de esa organización política.
Los votantes conocen a sus candidatos a alcaldes y regidores en sus respectivas demarcaciones, saben si lo han hecho bien o no, conocen sus intenciones y tienen una forma directa de medir los resultados alcanzados o los futuros planes de gobierno municipal que tengan.
Los alcaldes que buscan la reelección tendrán que someterse a una prueba de fuego ante sus munícipes, para evaluar si después de sus años de gestión, su aprobación por parte del electorado sigue siendo la misma, ha aumentado o disminuido. Los alcaldes que aspiran por primera vez apuestan todo a que sus electores les elijan basado en las propuestas presentadas.
En las próximas elecciones municipales se escogerán 158 alcaldes o alcaldesas a nivel nacional, también 1,164 regidores y 235 directores y 735 vocales.
Un panorama electoral complejo se vivirá en las elecciones municipales. Los principales partidos políticos apuestan a quedarse con las alcaldías más codiciadas a nivel nacional.
Las elecciones municipales 2024 se debaten entre el transfuguismo, el liderazgo local y la medición del poder.
Los resultados de la encuesta más certera y definitiva los tendremos este próximo domingo 18 de febrero.
