Economía Colaborativa: El regreso de las relaciones humanas

La economía colaborativa, modelo de negocio que surgió de manera circunstancial, ha logrado mantenerse en el mercado, mostrando cada vez más su fuerza bajo un pilar muy importante y que es concedido por el usuario a base de comentarios que resultan un tanto subjetivos: la confianza. Este fenómeno no es más que un medio por el cual los usuarios de las diferentes plataformas adquieren bienes o servicios de otros usuarios por precio determinado. Dentro de ellas podemos destacar: Didi, Airbnb, Uber, Homeaway, por mencionar algunos.     

Es indiscutible el poder que tiene el usuario sobre la reputación y/o supervivencia de la misma, ya que esta nueva forma de consumo que va desde búsqueda de alojamiento hasta, coches compartidos, experiencias gastronómicas, etc., sobrevive o muere por las vivencias, positivas o negativas, compartidas siendo este un “sello de garantía”.

Lo importante de todo esto radica en que quizás el simple hecho de ofrecer una opinión permite que los futuros usuarios tomen en consideración comentarios de personas desconocidas de quienes no sabemos sus intenciones reales, o más bien consideramos sus contribuciones “buenas” ¿en base a qué? Su precepción de lo que es correcto o no. Confiar en ellas implica que los futuros usuarios tomen en cuenta parámetros de consumidores anteriores, de modo tal que el propietario del medio se convierta en una persona de reputación alta y por consiguiente genere grandes ingresos y buen posicionamiento. El artículo publicado en este diario digital Hosteltur: “Comentarios de clientes para optimizar la estrategia de producto del hotel” especifica, de acuerdo a declaraciones de Gaston Richter, Director de Ventas de TrustYou para España y Portugal, que el 95% de viajeros lee las opiniones de otros, queriendo dejar dicho esto que resulta de mayor relevancia lo que piensen los demás sobre un producto/servicio que la misma información de una página web o de cualquier certificación reconocida que pueda tener.

Esta situación ha permitido que se cree una atmósfera de confiabilidad y relaciones humanas, donde no existen estatus sociales, preferenciales sexuales o pensamientos ideológicos, en el que se busca la mejora de un producto o servicio por medio de comentarios constructivos, y que a su vez permite compartir una buena experiencia, pero donde sobre todo en el que se garantiza la perdurabilidad en el tiempo de un producto o servicio.

Lo que años atrás se había perdido y parecía un imposible recuperarlo, al día de hoy confiamos en los demás gracias a la oportunidad de poder expresarnos libremente que ofrecen tanto los portales de opinión como estos modelos de negocios.