El primer ministro de Haití, Ariel Henry, llegó este jueves a Nairobi, donde se espera ultime con las autoridades de Kenia los detalles del despliegue de la misión multinacional autorizada por las Naciones Unidas y que el país africano se ofreció a liderar.
Henry se desplazó también a Nairobi con motivo del segmento de alto nivel de la VI Asamblea de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (UNEA-6), que tiene lugar este jueves y el próximo viernes.
El viaje del mandatario se produce un mes después de que el Tribunal Superior de Nairobi prohibiera el despliegue en Haití del contingente previsto de mil policías kenianos para encabezar la misión, al establecer que el Consejo de Seguridad Nacional de Kenia no tiene potestad para mandar a los agentes al extranjero.
Entonces, el juez Chacha Mwita afirmó que ese órgano -formado por el presidente, el vicepresidente, el jefe del Ejército, el director general de los Servicios de Inteligencia y el inspector general de la Policía, entre otros- sólo podría enviar a los agentes si existiese un «acuerdo recíproco» con el Gobierno anfitrión.
Tras esa decisión judicial, una delegación haitiana mantuvo a mediados de este mes en Washington reuniones con autoridades de Estados Unidos y de Kenia para planear la llegada de la Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad (MMAS) a la isla caribeña.
Uno de los aspectos que se abordaron en esos encuentros fue precisamente el memorando de entendimiento entre Kenia y Haití, para garantizar que se adapte a las legislaciones de ambos países.
El Consejo de Seguridad de la ONU autorizó en octubre de 2023 el envío de una misión de apoyo a la Policía Nacional de Haití, en respuesta a la solicitud manifestada un año antes por el primer ministro haitiano para erradicar a las bandas armadas.
Actualmente, estos grupos controlan el 80 % de la capital haitiana, Puerto Príncipe, e incluso las entradas y salidas de la ciudad, según un estudio de Iniciativa Global contra el Crimen Transnacional.
El despliegue de la misión se ha visto obstaculizado por los tribunales de Kenia, país que se ofreció a liderar una misión en la que aportarán también personal Jamaica, Bahamas, Antigua y Barbuda y Benín.
Mientras, la financiación está llegando con cuentagotas y procede sobre todo de Estados Unidos, Canadá y Francia, si bien la ONU ha establecido un fondo fiduciario para que la misión pueda recibir contribuciones adicionales de los países que lo deseen.
Según la ONU, en 2023 fueron asesinadas en Haití 4.789 personas, 1.698 resultaron heridas y 2.490 secuestradas, siendo la tasa de homicidios en el país de 40,9 por 100.000, el doble del año anterior y una de las más altas del mundo.