Hecmilio Galván, director del Fondo Especial para el Desarrollo Agropecuario (FEDA), celebró el éxito del Plan de Relanzamiento, Repoblamiento y Desarrollo del sector ovino-caprino del país, junto con la campaña “Tamo en Chivo”.
Según Galván, estas iniciativas han marcado un cambio significativo en el sector. Hace apenas dos años, la carne de chivo era escasa y se vendía a 350 pesos la libra en la mayoría de los puntos de venta. Sin embargo, gracias a estos programas, ahora hay una abundancia de carne de calidad a un precio más accesible, alrededor de 290 pesos la libra.
El director del FEDA explicó que el precio más bajo no ha afectado la rentabilidad de los productores. Al contrario, ha habido un aumento del 35% en la producción caprina, lo que ha permitido satisfacer la demanda nacional de este nutritivo alimento cárnico.
Además, destacó que la carne de chivo ahora forma parte de la carta de numerosos restaurantes, lo que demuestra su creciente popularidad y aceptación en el país. Esto no solo beneficia a los productores, sino que también contribuye a diversificar la oferta gastronómica nacional.
Hecmilio Galván explicó que para revitalizar el sector ovino-caprino, el FEDA otorgó 1,053 créditos blandos de 300 mil pesos cada uno a criadores a través del Banco Agrícola. Estos créditos se distribuyeron entre los criadores de las nueve provincias fronterizas productoras de chivos y ovejas.
Además de recibir el apoyo financiero, los beneficiarios fueron capacitados como emprendedores y futuros empresarios del sector. Galván destacó que este programa ha comenzado a mostrar mejoras significativas en las finanzas familiares y comunitarias de los criadores.
El director del FEDA también resaltó el impacto de esta política pública en el subsector productivo nacional. En 2019, la cartera de crédito para este sector era de 21 millones de pesos, mientras que en 2023 alcanzó los 432 millones de pesos, lo que representa un incremento de más de un 2,200% en cuatro años.
Para lograr esta transformación, el FEDA llevó a cabo más de 200 actividades de sensibilización, socialización y capacitación en todas las provincias del país. Además, organizó siete grandes seminarios educativos que contaron con la participación de más de 8,000 productores ovino-caprinos. Estos esfuerzos han permitido que los criadores se conviertan en empresarios, adquiriendo habilidades que les permiten adoptar técnicas avanzadas de crianza, asegurando así una mayor rentabilidad.
El veterinario Miguel Mercedes, coordinador del proyecto ovino-caprino del FEDA, destaca que, en 2022, el precio de la carne de chivo alcanzó los 400 pesos por libra, volviéndose inaccesible para muchos. Sin embargo, actualmente, el precio se ha ajustado considerablemente, beneficiando tanto a consumidores como a productores. La libra de chivo para guisar se encuentra ahora entre 289 y 290 pesos en supermercados y puntos de venta como la Chivera El Varón en Santo Domingo.
Esta mejora en el precio ha permitido que platos tradicionales como el “chivo guisado” y el “chivo asado” regresen a las mesas dominicanas. Además, restaurantes están incluyendo en sus menús exquisitas opciones como la paleta de cordero, mofongo, croquetas y risotto de chivo.
Mercedes resalta que el FEDA ha logrado este ajuste de precios sin afectar la rentabilidad de los productores, gracias a un aumento del 35 % en la producción. Esto se ha logrado mediante el financiamiento en condiciones blandas, la adquisición de padrotes mejorados genéticamente y la implementación de métodos de crianza avanzados.
